domingo, 3 de septiembre de 2017

Generación Z y Comunicación.





Generación Z y Comunicación

 

“Piensa como un hombre sabio pero

comunícate en el lenguaje de la gente”

William Butler Yeats.

Por J. Rodríguez M.

Después de haber leído el texto “Generación Z. El último salto generacional”, me despertó la inquietud[1] de relacionarlo con la comunicación, competencias comunicativas básicas, comunicación interpersonal, comunicación grupal y lenguaje kinésico.
                              Comunicación       
                         
                     



Primeramente se harán algunas consideraciones del orden comunicativo.

Ámbito comunicativo

Manuel Martín Serrano plantea, que su Teoría de la Comunicación estudia “la capacidad que poseen algunos seres vivos de relacionarse con otros seres vivos intercambiando información”.
 
Asimismo “Actor de la comunicación es cualquier ser vivo que interactúa con otro u otros seres vivos de su misma especie o de especies diferentes recurriendo a la información”.
Para diferenciar a los actores comunicativos, utiliza el término “Ego” al actor que inicia el intercambio comunicativo  “Alter” (Alteres) al actor que da respuesta a “Ego”.
En su modelo dialéctico de la comunicación señala que el actor hace uso de los instrumentos físicos y/o tecnológicos, las representaciones y expresiones para realizar el intercambio comunicativo.  
Robbins y Coulter nos brindan la siguiente definición: "Comunicación es la transferencia y la comprensión de significados".
Para la Universidad Loyola del Pacífico la comunicación es: el proceso mediante el cual el emisor (Ego) y el receptor (Alter) establecen una conexión en un momento y espacio determinados para transmitir, intercambiar o compartir ideas, información o significados que son comprensibles para ambos.
A efecto de puntualizar la definición, se desglosan los elementos que la conforman.
a)   Proceso: La comunicación es un proceso que incluye los siguientes pasos: Primero, Ego desea transmitir, intercambiar o compartir un mensaje con Alter. Segundo, Ego codifica ese mensaje para que sea comprensible para Alter. Tercero, envía ese mensaje codificado mediante un canal (él mismo, un correo electrónico, un aviso en prensa escrita, un programa de televisión, etc...). Cuarto, Alter  recibe y decodifica ese mensaje. Quinto, Alter responde a ese mensaje en función a su comprensión del mismo y da lugar a una retroalimentación.  
b)   Ego  y Alter: Para que se dé la comunicación deben existir dos partes, Ego y Alter, y ambos deben estar predispuestos a comunicarse; es decir, a emitir un mensaje y/o a recibirlo. En el momento en que una de las partes no está interesada en dar y/o recibir un mensaje se anula la comunicación.
c)    Conexión: Toda comunicación conecta o une a dos o más personas en un momento dado y en un espacio (físico o virtual) determinado. Sin embargo, cabe destacar que esa conexión puede tener diversas formas, es decir, que puede ser en persona (cara a cara), a distancia (por ejemplo, mediante el envío y recepción de correos electrónicos, mensajes instantáneos, etc..) o impersonal (mediante un programa de televisión o radio en la que el presentador transmite un mensaje a una audiencia compuesta por miles de personas).
d)   Transmitir, intercambiar o compartir: Cuando se entabla una comunicación se transmite, intercambia o comparte un mensaje, por tanto, puede ser un proceso dinámico de ida y vuelta entre el Ego y Alter (en el que ambos intercambian ideas, información o significados), o, simplemente ser una transmisión de Ego a Alter (como sucede con los programas de televisión y radio).
e)    Ideas, información o significados comprensibles: Para que se pueda entablar una comunicación entre Ego y Alter, deben existir ideas, información o significados  que sean comprensibles para ambos; es decir, que el conjunto de símbolos que utilizan (verbales o no) sean entendibles para ambas partes, caso contrario, no podrían entablar una comunicación.
En la actualidad el acto comunicativo idóneo, se caracteriza por la práctica de una comunicación interpersonal y/o grupal adecuada en la que los actores que intervienen ponen en juego sus competencias comunicativas y hacen uso del lenguaje kinésico.
Se entenderá como competencia comunicativa a la capacidad de realizar adecuadamente el proceso de comunicación, usando los conectores idóneos  para entender, elaborar e interpretar los diversos actos comunicativos, teniendo en cuenta el  significado explícito o literal y las implicaciones que esto conlleva.
Según Víctor Miguel Niño Rojas las competencias comunicativas básicas son
a)      Saber leer
b)      Saber escribir
c)       Saber hablar
d)      Saber escuchar
En el desarrollo del Saber leer se debe puntualizar el proceso de la comunicación, en donde el autor (escritor, emisor) enuncia y emite un mensaje (texto escrito) con información y el lector (receptor) identifica la información, la comprende y la utiliza de acuerdo a sus intereses.
Desde este punto de vista, el leer (receptor) y escribir (emisor) permite entablar un diálogo entre el autor y el lector.
El leer y escribir no es el uso mecánico y la interpretación de las letras, sino un proceso profundo y significativo, que da lugar a una realimentación entre los actores que intervienen en la comunicación.
 Para comprender los textos se hace necesario compenetrarse en los secretos plasmados por el autor en el escrito y así poder analizar, sintetizar y ordenar las ideas expuestas durante la lectura.
La kinésica es el lenguaje no verbal que  estudia el significado expresivo, apelativo o comunicativo de los movimientos corporales y de los gestos aprendidos o somatogénicos, no orales, de percepción visual, auditiva o táctil, solos o en relación con la estructura lingüística y paralingüística y con la situación comunicativa
Se considera que los conceptos vertidos en el ámbito comunicativo son suficientes para lograr el objetivo del presente texto
 
Generación Z.
¿Por qué la última letra del abecedario?
Los primeros miembros de la Generación Z, la forman los nacidos entre 1994 y 2009.
Es la primera generación que ha hecho uso de Internet desde las etapas más tempranas de su aprendizaje y socialización.
 Se hace necesario mencionar las dos generaciones que anteceden a la Generación Z. La Generación X está integrada por los nacidos en 1965, hasta aquellos que llegaron a este mundo en 1979. La Generación Y, también conocida como del Milenio o Milénica la forman los que nacieron entre 1980 y 1994.
   Si bien es cierto que la Generación Z hizo uso de los adelantos tecnológicos, también es cierto que no la exime de comunicarse interpersonalmente y grupalmente con los integrantes del núcleo familiar de forma verbal y  no verbal.
Iñaki Ortega Cachón director Deusto Business School, Universidad de Deusto en Madrid  y Núria Vilanova fundadora de ATREVIA (LA CONSULTORÍA GLOBAL DE COMUNICACIÓN CON ESPIRITU LATINO No.1 EN ESPAÑA), puntualizan: x, y, z es el nombre de las generaciones de los que tienen menos de cincuenta años. Todo inició con el fotógrafo Robert Capa que escribió, después de las grandes guerras, sobre la generación desconocida, la X.
Con aparición de un informe sobre los hábitos de los estudiantes, surgió esta noticia: “Efecto pavoroso de los estímulos audiovisuales en la educación”. Emerge la voz de alarma sobre el abuso que hacen los adolescentes de los dispositivos electrónicos, ya que se establecía una relación inversamente proporcional entre el número de horas que los estudiantes están expuestos a las cinco pantallas (tv, móvil, tableta, consola y PC) y su rendimiento escolar. Al parecer, “los alumnos adoptan hábitos lúdicos que penalizan el esfuerzo que supone, por ejemplo, leer un libro”.
Lo que para nosotros es una experiencia innovadora, como ojear un periódico digital, leer un libro en un Kindle o escuchar música en Spotify, para ellos es el soporte natural de esos contenidos. Y ahí está la clave, la tecnología es el medio, no el fin.
Los avances tecnológicos que día a día aparezcan en el escenario mundial, serán utilizados por los individuos como herramientas para el bien de la humanidad y hacer más angosta la brecha de la desigualdad social.
La lectura es clave en la educación, así como el cálculo o el dibujo, y lo seguirá siendo con independencia de que se lea en papel o en una pantalla; se hagan las operaciones matemáticas en calculadora o con Excel; se dibuje con rotring o en autocad.
Se considera que permanentemente el alumno debe de ir puliendo sus competencias comunicativas básicas, a fin de que el proceso comunicativo se dé lo más fluido y entendible entre Ego y Alter, de ahí que no solamente la lectura es clave en la educación, sino que se deba completar con escribir, escuchar y hablar.  
El exceso del uso de las pantallas en cualquier de sus modalidades está originando individualismo, sedentarismo, aislamiento, falta de ejercicio físico que va en deterioro de la salud.
Los jóvenes que hoy devoran las pantallas son miembros de la última generación. Y no se van a enloquecer o embrutecer por no leer signos en papel…Sino porque los miembros de la Generación Z, son los últimos de una época. Una era que está muriendo mientras comienza otra donde la tecnología lo cambiará todo: los empleos, las relaciones sociales, los viajes, las compras y también la educación.
Los integrantes de la Generación Z no van a enloquecer ni embrutecer, pero será imposible que se sustraigan a los núcleos familiares, sociales y laborales en los que tengan participación, ya que se encontrarán con Egos y Alters que son de diferentes generaciones y tendrán que relacionarse de forma interpersonal o grupal.
Su personalidad conformada en una sociedad líquida, diversa y en crisis, hace presagiar que, con la llegada de los jóvenes Z, se produzca un cambio generacional mucho más radical que el protagonizado por los millennials. ¿Están las aulas, las empresas y la sociedad preparadas para ellos?
Zygmunt Bauman define la sociedad moderna líquida como aquella sociedad donde las condiciones de actuación de sus miembros cambian antes de que las formas puedan consolidarse en unos hábitos y en una rutina determinada. Esto, evidentemente, tiene sus consecuencias sobre los individuos porque los logros individuales no pueden solidificarse en algo duradero, los activos se convierten en pasivos, las capacidades en discapacidades en un abrir y cerrar de ojos.
Desarrollando la imaginación sobre fluidez (liquidez) se puede deducir que al final del día se desemboca en turbulencia.
Los físicos dicen que a medida que aumenta la velocidad del fluido, los modelos clásicos de la dinámica de los líquidos dejan de funcionar y se pasa a un estado llamado turbulencia.
Existe la posibilidad que con la llegada de los miembros de la Generación Z, se produzcan cambios esenciales, sustanciales, sustanciales y que debido a su formación en una sociedad líquida, dichos cambios terminen en turbulencia.   
En el ámbito social se puede plantear igualdad entre turbulencia e incomprensión.
 
¿Quiénes forman parte de la Generación Z?
La Generación Z agrupa a las personas nacidas con la World Wide Web ya totalmente desarrollada y presente en la gran mayoría de los hogares.
Pese a que los académicos no coinciden con exactitud en las fechas que delimitan las cohortes de edad que la componen, suelen considerarse como integrantes de esta generación a los nacidos entre 1994 y 2009.
Quizás el cambio que se evidencia de manera más notable es el de los dispositivos tecnológicos que han marcado cada época, pues mientras la Generación X ha crecido con el walkman, el PC de sobremesa o la Game Boy, la Generación Z tiene a su alcance un smartphone y tableta, así como usa intensivamente Whats App para comunicarse.
El desarrollo de Internet ha tenido mucho que ver en el proceso: Mientras en 1992 existían 10 páginas web, en 2013 se contabilizan 672 millones, dato que, sin duda, evidencia el salto tecnológico que se ha generado en estos años.
¿En qué benefició y/o  beneficia a los miembros de la Generación Z el salto tecnológico para convivir en el núcleo familiar, en el ámbito escolar y con la sociedad?
¿Qué porcentaje de los miembros de la Generación Z tiene acceso a las pantallas sobre todo cuando cursan la educación básica?
La infraestructura de los planteles escolares estará en condiciones de recibir a los miembros de la Generación Z.
El personal docente que se formó profesionalmente en diferentes momentos históricos y ahora se encuentran frente a grupo, tendrán que hacer esfuerzo extra para llevar a cabo el proceso comunicativo con los miembros de la Generación Z que tienen bajo su responsabilidad y se cumplan con planes y programas de estudio.
¿Por qué se va a hablar de los jóvenes Z durante la próxima década?
Los primeros miembros de la Generación Z comienzan a salir de las universidades, a incorporarse al mundo laboral y a reclamar su sitio en el mundo. Al igual de lo que ocurrió con la Generación X y lo que está aconteciendo con los millennials, la llegada de los jóvenes Z a la edad adulta tendrá un fuerte impacto en la sociedad y las empresas.
Es inevitable el impacto que se producirá con la llegada de los miembros de la Generación Z al incorporarse al mundo laboral y social, pero sería interesante saber cómo se comunicarán interpersonalmente y grupalmente con los seres humanos con quien tengan contacto y son de generaciones diferentes a la suya.
Existen grandes expectativas en torno a estos jóvenes, al ser la primera generación que ha asumido desde que tiene uso de razón que el mundo se ha hecho pequeño, que la diversidad es consustancial a cualquier sociedad moderna y que el desarrollo democrático, unido al tecnológico, es imparable y genera nuevos derechos humanos.
El uso intensivo de las nuevas tecnologías de la información es una de las señas de identidad de la Generación Z y, aunque este es un atributo asociado también a los millennials, todo parece apuntar a que el mundo digital ha conformado de manera más profunda la personalidad de las últimas cohortes de jóvenes, debido a que la inmersión en él ha tenido lugar en fases más tempranas.
Aunque el mundo digital ha conformado la personalidad de los miembros de la Generación Z, es imposible separar  la parte sensible del cualquier ser humano y ellos no serán la excepción, ya que en un momento dado tendrán que establecer comunicación interpersonal o grupal.
Los integrantes de la Generación Z que egresen de las universidades y se incorporen al mundo del trabajo, se encontraran en su entorno con seres que no forman parte de su generación y que tendrán que relacionarse laboralmente y de alguna manera socialmente, tendrán que entrar en una etapa de inducción y adaptación a efecto de establecer cómo se darán los actos comunicativos entre ellos en sus diferentes modalidades.
 
Los Z y la educación
La educación evoluciona de forma constante para adaptarse a los cambios socia-les y, hoy más que nunca, lo hace a un ritmo vertiginoso para poder acompasar la forma de aprender de los nativos digitales. En este contexto, los jóvenes Z pertenecen a una generación que da por desaparecido el concepto de trabajo fijo, actúa con normalidad frente al hecho de cambiar de empleo, sector y categoría profesional e incluso destierra la educación formal para centrarse en proyectos de aprendizaje más vocacional.
El concepto de trabajo fijo, el cambiar de empleo, sector y categoría profesional serían factibles, pero el destierro de la educación formal se ve muy distante.
En mi País en ningún momento la Secretaría de Educación Pública (S.E.P.) se ha pronunciado por modificar el Sistema Educativo Nacional, ni los planes y programas de estudio a efecto de atender a los miembros de la Generación Z.
“Aprender a aprender” y que México será un  país bilingüe dentro de veinte años son las prioridades de la S.E.P. a sazón de la Reforma Educativa.  
Asimismo, algunos expertos aseguran que, debido a la generalización de los mensajes cortos y que los dispositivos digitales, se han convertido en el medio de relación social por excelencia, las nuevas promociones de estudiantes tienen más dificultades para hablar en público y redactar textos complejos, así como para mantenerse concentrados de manera prolongada.
Las dificultades y deficiencias de los estudiantes de la Generación Z posiblemente se deban a escases de las competencias básicas de la comunicación (saber leer, saber escribir, saber hablar y saber escuchar).   
Se hace urgente preparar a la Generación Z para una realidad laboral que dependerá de su capacidad de trabajar en red, con culturas diferentes y en puestos relacionados con la creatividad y la innovación.
Los Z y su uso de la tecnología
Los miembros de la Generación Z han hecho del uso masivo de las redes sociales su seña de identidad.
De esta forma, cada vez tienen más oportunidades de colaborar en proyectos culturales, sociales, políticos y empresariales, así como de expresar su creatividad con menos esfuerzo. Pero este concepto de socialización también supone un reto para esta generación, que deberá saber equilibrar su vida real y “cibernética”, así como lidiar con el riesgo de adicción tecnológica y otros peligros relacionados con la privacidad, el acoso y el cibercrimen.
Con el devenir los miembros de la Generación Z tendrán la oportunidad de colaborar en el diseño, elaboración y realización de proyectos culturales, sociales, políticos y empresariales. ¿Cómo se comunicaran y transmitirán los productos de su creatividad,  si tienen deficiencias y dificultades para aplicar las competencias básicas de la comunicación. 
Es posible que les sea difícil encontrar el justo medio entre el mundo que les tocó vivir día a día en sus diferentes ámbitos y el dominio de sus excelentes conocimientos cibernéticos.
Pero el gran cambio respecto a las generaciones precedentes es la desjerarquización de la transmisión de información, esto es: la Generación Z no sólo cree que posee el derecho inalienable de crear, modificar y transmitir la información, sino que es desconocedora de que la información tenía filtros en el pasado.
En el lado positivo, todo el saber está a su alcance y el hecho de que puedan compartirlo convierte a la red de redes en una poderosísima herramienta educativa que los Jóvenes Z van a aprovechar como nunca antes. Pero sin que los miembros de la Generación Z tengan el juicio crítico de saber cómo cribar esa información, son también contribuyentes al enmarañamiento del conocimiento en Internet.
El laberinto en la información y el conocimiento creado por la Generación Z debido a la carencia de juicio crítico, se podría subsanar al poner en juego las competencias básicas de la comunicación. Se recordará que la transmisión de información y conocimiento, llegará a Alter de forma escrita o verbal de tal manera que la decodifique para poder asimilarla.
Parafraseando a Edgar Morin se puede puntualizar: “Recordemos que ninguna técnica de comunicación, del teléfono a Internet, aporta por sí misma la comprensión. La comprensión no puede digitarse”
Además, el avance digital ha supuesto un cambio profundo en la estructura de los medios de comunicación, que se convierten en una suerte de generadores masivos de titulares en detrimento del análisis y contraste de las informaciones. Por tanto, estamos ante la generación con más acceso a la información de la historia, pero no necesariamente la mejor informada.
Si bien es cierto que la Internet es una inagotable fuente de información, también es cierto que se debe tener el cuidado de seleccionar la que es veraz, confiable, fidedigna, indiscutible y fehaciente, a efecto de plasmarla eficaz y eficientemente.
Se puede vislumbrar que el enfrentarse la Generación Z al mundo laboral y en si a la realidad cotidiana, aplicará los conocimientos idóneos que ostenta de acuerdo al escenario en que se desenvuelva, sin apartarse de la comunicación en cualquiera de sus modalidades
 
Los Z, la innovación y el emprendimiento
En el momento de la incorporación de los Jóvenes Z a las universidades y al mercado laboral, el ritmo y forma a través de los cuales se produce la información ha cambiado enormemente respecto a las generaciones precedentes. La producción científica mundial se ha multiplicado por dos en la última década, los volúmenes de datos digitales se empiezan a contar en petabytes y la velocidad a la que se transmiten y procesan tiende a la inmediatez gracias al Io T y el big data.
Independientemente del volumen de datos digitales y de la información que aporte la Generación Z al mundo en que vive, tendrá presente hacer uso de las competencias básicas de la comunicación, para que los interlocutores a quien le llegue la información la puedan comprender y usarla adecuadamente. 
En este contexto, innovar ya no es pensar fuera de la caja –el famoso aforismo anglosajón think out of the box–. La caja se ha desbordado, se ha roto y, además, sus contenidos son constantemente cuestionados, de forma que es difícil saber qué sirve de la caja y qué debe ser desechado. Así, los miembros de la Generación Z se preparan para innovar de una forma diferente: cada uno debe construir su propia caja tomando elementos de información que puede modificar y alterar, que pueden provenir de fuentes académicas o vulgares y que pueden estar relacionadas con uno o varios sectores distintos de la ciencia o la economía. Los triunfadores serán, por tanto, los más capaces de seleccionar y combinar las piezas de información y obtener así la idea innovadora. Por tanto, el conocimiento técnico será imprescindible, pero los profesionales del futuro más valiosos no serán tanto los que estén ultraespecializados en un campo concreto, sino los que sean polímatas y puedan hibridar conocimientos de ámbitos diferentes.
La polimatía que aporten los polímatas, aparte  de hibridarla, tendrán la sensibilidad idónea para socializarla a los Alters que estén interesados en asimilar la amalgama de conocimientos.
 
Los Z en el mundo del trabajo
A los Jóvenes Z les preocupa no encontrar un empleo acorde a su personalidad, no tener oportunidades de crecimiento profesional y no alcanzar las metas que se marquen a lo largo de su carrera. Asimismo, prefieren entornos flexibles que faciliten la conciliación de su vida profesional y personal, así como favorezcan su creatividad.
Por otro lado, la Generación Z acentúa las particularidades de los millennials, pues su preferencia por la autonomía en el entorno laboral fuerza a las empresas a proporcionarles una esfera de libertad en la que se alineen sus intereses con los de la organización.
Además, estos jóvenes acostumbrados a la inmediatez y eficiencia que proporciona la tecnología incrementan la presión de las empresas por revisar sus procedimientos internos e invertir en su mejora.
Por último, las nuevas generaciones serán protagonistas de la llamada gig economy, es decir, una gran red de trabajados autónomos que, enlazados en cadena, generan un gran proyecto. Una parte de los Jóvenes Z se acostumbrará a vincularse a proyectos más que a empleadores, lo que proporcionará mayores cotas de libertad y autonomía, aunque también incrementará la incertidumbre y el riesgo de caer en la precariedad laboral.
En principio, en México ya existen empresas, que contratan profesionistas para que se incorporen en diferentes áreas de su estructura, en la modalidad de tiempo y lugar de trabajo libre. Esta sería gran ventaja para los miembros de la Generación Z.
A las empresas les beneficia este escenario, en virtud de que exime al patrón de una serie de prestaciones del orden social, que están plasmadas en la legislación laboral.    
 
Los Z como emprendedores
La preferencia por la autonomía dentro del entorno laboral, que ha llevado a muchos millennials a optar por ser emprendedores antes incluso de tener su primer trabajo, se mantiene en quienes están llamados a recoger su testigo.
El informe llevado a cabo por la consultora internacional Universum sobre actitudes y preferencias laborales de los alumnos de secundaria parece avalar la idea de que el fenómeno emprendedor alcanzará nuevas cotas con la progresiva entrada de la Generación Z. Y es que es de esperar que el número de nuevas empresas creadas por empresarios jóvenes se incremente como consecuencia del atractivo que para ellos tiene el trabajo por cuenta propia frente al empleo asalariado.
Otra ventaja que tendrían los miembros de la Generación Z, es que en México existen programas para atender el emprendimiento a nivel federal, estatal y municipal.
Un 55% de los 50.000 adolescentes encuestados por Universum en 45 países manifestó tener interés en lanzar su propia startup. En España el porcentaje baja hasta el 39%, pero sigue siendo muy relevante, pues rompe la dicotomía entre el trabajo en la Administración y en la gran multinacional que tradicionalmente ha regido las preferencias laborales de los más preparados.
En cuanto a las motivaciones para emprender, ganar mucho dinero comparte protagonismo con otras menos materialistas como ser su propio jefe y contribuir a mejorar el entorno.
Ya han empezado a ser consumidores de algunas de las iniciativas nacidas recientemente en el marco de la economía colaborativa, un fenómeno que esta generación entiende, apoya y acepta como algo normal. Muchos de sus integrantes progresivamente irán sumándose a esta realidad emergente, en calidad no ya de usuarios, sino también de oferentes de servicios y de emprendedores.
Muy relacionado con las oportunidades que brindan los entornos colaborativos digitales estaría la gig economy, de la que las nuevas generaciones serán protagonistas.
Esta manifestación refleja el paso de una economía donde el trabajo era estable, por cuenta ajena y para un solo empleador a otra en la que éste tiende a ser temporal, autónomo y para varios empleadores a lo largo de la trayectoria profesional. Se generará así una gran red de trabajos autónomos que, enlazados entre sí, permitirán acometer iniciativas de gran alcance.
El corolario de esta tendencia es que una parte de los Jóvenes Z se acostumbrará a vincularse a proyectos más que a empleadores, lo que proporcionará mayores cotas de libertad y autonomía, aunque también incrementará la incertidumbre y el riesgo de caer en la precariedad laboral.
 
Conclusión
Sin mostrar adversidad por los miembros de Generación Z, se hace necesario puntualizar las deficiencias y dificultades que poseen para llevar a cabo el proceso comunicativo con quienes se ubican en su entorno familiar, escolar, social y laboral.   
El mínimo y/o mediano desarrollo de las competencias básicas de la comunicación es un indicador del deficiente proceso comunicativo que practican.
Sería injusto buscar un o varios culpables de estas deficiencias en el proceso comunicativo, que es parte de la formación integral de ser humano, pero se recordará que los primeros procesos comunicativos se dan en el núcleo familiar.
Será el propio miembro de la Generación Z quien a percatarse de sus deficiencias en el ámbito comunicativo vea la forma de subsanarlas.
Estimado lector pongo a sus órdenes mi correo electrónico jesusrodriguezmejia@hotmail.com para recibir su opinión y comentario.
1] ResumenEjecutivo_GeneracionZ_140315-2 (1).pdf
CDMX a 29 de agosto de 2017
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
                                                                                        
 
   




[1] ResumenEjecutivo_GeneracionZ_140315-2 (1).pdf

1 comentario:

  1. Estimado Jesús:

    Deliberadamente o no, estás abriendo una discusión muy interesante para tratar de entender lo que está ocurriendo en el mundo; no solo es un simple cambio tendencional, sino un cambio de época que bien podría ser análogo al paso de la edad media a la ilustración. Creo que de esa dimensión es el cambio que en mi opinión, somos afortunados de estarla viviendo y que ni siquiera nos estamos dando cuenta de sus implicaciones en todo orden: en el social, económico, político, educativo y hasta moral. Y como bien apuntas, el tema de la comunicación se hace imprescindible para entenderlo mejor y evitar las “turbulencias” que la “sociedad líquida” provoca al no alinearse el cambio constante con las estructuras de toda índole.

    Aun sin mencionar el concepto de sociedad líquida, creo justamente que esa falta de alineación oportuna ha provocado históricamente las rupturas sociales y por consecuencia las revoluciones han surgido para buscar nuevas formas de relación social, o nuevos “pactos sociales”. Sin embargo, esta nueva época va demasiado rápido, no da tiempo de hacer ajustes porque cuando se hace uno, queda obsoleto en un espacio de tiempo muy corto. Hay muchos ejemplos: las plataformas digitales (uber, Airbnb, Amazon, etc) producen ganancias exorbitantes y no existe legislación para regularlas; las criptomonedas son el dolor de cabeza de los bancos centrales en el mundo; en el mediano plazo la robotización y la inteligencia artificial sustituirán carreras universitarias tradicionales, etc.. Si esa velocidad de cambios las queremos alinear al sistema educativo en México, honestamente nos deprimimos por la absoluta disociación que persiste: estamos más preocupados por negociar si se siguen heredando las plazas del magisterio, si se deben o no evaluar los alumnos o si debe ingresar sin examen de admisión a la educación superior, pero de contenidos educativos, nada.

    Si la revolución tecnológica es inherente al desarrollo humano, entonces el tema central está en encontrar los instrumentos para incorporarnos y disminuir en lo posible que las brechas de la desigualdad se amplíen. En ese sentido las políticas públicas se tornan un elemento fundamental y regresando al tema educativo, la capacitación del docente para encontrar formas de comunicación más eficaces con una generación que nació en la era digital es imprescindible. Esa generación con sus defectos y virtudes va a sostener a un país económicamente en el cual los viejos vamos a ser mayoría: de su productividad van a depender las pensiones futuras.

    Creo que hablar de la generación Z por si misma abre muchos campos de debate para tener un diagnóstico adecuado de lo que está pasando en el mundo y lo mas importante: como enfrentar lo que está por llegar, creo que apenas se asoma la punta del iceberg y lo que hoy vemos como cambios vertiginosos, se van a acelerar mucho más.

    Dentro de esta complejidad siempre surgen voces para darle mayor valía a temas que parecen obsoletas cuando la tecnología se privilegia en el contexto de las relaciones sociales. Esas voces se refieren a la necesidad de rescatar los valores humanos del individuo, los que lo enaltecen y creo que ahí la docencia juega un papel muy importante: se puede crear un algoritmo para sustituir a un contador en una empresa, pero la parte moral y ética, entre otras cosas, solo es inherente al ser humano y esa hay que rescatarla.

    Saludos,

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